Como un “dime con quién andas y te diré quién eres” (dime a quién le entregas boletas…) se está transformando el asunto de las boletas de honorarios tras las revelaciones por goteo que van apareciendo día a día con las investigaciones por los casos Penta, SQM y Caval.
Según publica El Mercurio, la UDI envió un oficio al Servicio de Impuestos Internos para saber precisamente a quiénes les boleteó Sebastián Dávalos y su mujer, Natalia Compagnon entre los años 2009 y 2015.
La arremetida del gremialismo llegó a través de los diputados Felipe Ward y María José Hoffmann, quienes argumentan que luego de conocer las declaraciones que Dávalos y Compagnon ante la Fiscalía de O’Higgins es necesario conocer los servicios profesionales que han prestado durante los últimos años.
“Es imprescindible tener claridad respecto de los servicios profesionales prestados por Sebastián Dávalos y Natalia Compagnon entre 2009 y 2015. La ciudadanía se pregunta con justa razón si este matrimonio también pudo haber prestado servicios a Giorgio Martelli, o incluso a SQM”, dijo la jefa de bancada de la UDI.
Ward por su parte, planteó que “por la transparencia total que debiese existir en torno a la Presidenta, es necesario saber si su hijo y su nuera prestaron servicios para cualquier empresa entre 2009 y 2015″, y agregó que “tenemos que recordar que Dávalos trabajó para el Estado hasta 2012, por lo que sería bueno despejar cualquier duda e incompatibilidad”.
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